Aunque todos y todas la conocemos como Claude Arrieu (1903-1990) su nombre real era Louise-Marie Simon. Pero en su época, muchas compositoras usaban nombres masculinos para que su música fuera tomada en serio. Fue una prólifica compositora que estudió en el Conservatorio de París, donde consiguió el primer premio de composición en 1932. Su estilo es elegante, vivaz, con gran expresión y unas melodías fabulosas. Trabajó en la radio Francesa. Tenía gran interés en la evolución del lenguaje musical y usó los medios técnicos disponibles en su trabajo para avanzar en ello.
Así, escribió música en todos los estilos, compuso obras tanto de música de cámara, como música para teatro, cine, radio y music hall, aportando su voz en cada situación, dramática o cómica, con un gusto particular por el ritmo y las imágenes. Vivacidad, claridad de expresión y un sentimiento natural para la melodía son sus sellos distintivos. (Wikipedia)
La obra fue compuesta en 1946 y consta de tres movimientos. Se considera una clara influencia de la tradición francesa, por la influencia de compositores a los que admiraba, y porque consta de una escritura instrumental ágil y un gran enfoque melódico.
I. Allegro Moderato. Dos compases de espera y comenzamos…